“Si tan solo…” Estas palabras juntas crean una de las frases más tristes en el idioma español. Muchas veces pensamos que si actuamos o nos comportamos de tal o cual manera será lo mejor para nosotros, dejando al costado nuestros gustos y deseos.
A corto plazo, quizás tomar una de estas decisiones te dé resultados pero, a la larga, terminarás lamentándote por haber actuado de esa manera (no o haber actuado en lo absoluto). Más que encajar con los demás, quizás debemos trabajar nuestra personalidad y fortalecernos emocional y mentalmente para afrontar el día a día.
Para empezar a trabajar en ello este año, aquí están 10 decisiones lamentarás en una década o menos y cómo puedes evitar tomarlas o rectificar el camino si es que ya lo has hecho. Nunca es tarde para hacer las cosas mejor 😀
Tabla de contenidos
- 1. Ser quien no eres para impresionar a los demás
- 2. Esperar siempre el mañana
- 3. Evitar cambiar, crecer y evolucionar
- 4. Dejar que otras personas diseñen tus sueños por ti
- 5. Tratar de controlar cada pequeña cosa
- 6. Mantener compañeros negativos
- 7. Conformarte con menos de lo que mereces
- 8. Ser demasiado egoísta
- 9. Renunciar cuando las cosas se ponen difíciles
- 10. Dejar que la pereza y el desgano te dominen
1. Ser quien no eres para impresionar a los demás
Si el rostro que siempre muestras al mundo es una máscara, un día ya no habrá nada debajo de ella. Cuando pasas demasiado tiempo pensando en la percepción que tienen los demás sobre ti o quien los demás quieren que seas, eventualmente olvidas quién eres realmente.
Así que no le temas a los juicios de los demás; sabes en tu corazón quién eres y cuál es tu verdad. No tienes que alcanzar la perfección para impresionar e inspirar a las personas. Deja que se impresionen y se inspiren por la forma en que lidias con tus imperfecciones.
«Nuestras imperfecciones nos ayudan a tener miedo. Tratar de resolverlas nos ayuda a tener valor» – Vittorio Gassman.
2. Esperar siempre el mañana
El problema es, que siempre pensamos que tenemos más tiempo del que de verdad tenemos. La verdad es que un día te vas a despertar y ya no habrá más tiempo para trabajar en las cosas que siempre quisiste.
Y en ese punto bien podrías haber alcanzado las metas que estableciste para ti o tendrás una lista de excusas de por qué no lo hiciste.
Libros recomendados para ti: «La Última Lección» de Randy Pausch y «El poder de los hábitos» de Charles Duhigg.
3. Evitar cambiar, crecer y evolucionar
Si quieres conocer tu pasado mira tus condiciones presentes. Si quieres conocer tu futuro, mira tus acciones actuales.
Debes dejar ir lo viejo para hacer espacio para lo nuevo; lo viejo se ha ido y nunca regresará. Si reconoces eso justo ahora y das los pasos necesarios, te vas a posicionar a ti mismo para alcanzar un éxito perdurable.
4. Dejar que otras personas diseñen tus sueños por ti
El mayor reto en la vida es descubrir quién eres; el segundo reto es ser feliz con lo que descubras. Una gran parte de esto es tu decisión de permanecer fiel a tus propias metas y sueños.
¿Hay personas que no están de acuerdo contigo? Bien. Eso significa que estás estableciendo tu territorio y caminando a tu propio destino.
Algunas veces harás cosas que otros consideren locuras, pero cuando te descubres perdiendo la noción del tiempo en algo que te emociona, ahí es cuando sabes que estás haciendo las cosas correctas.
5. Tratar de controlar cada pequeña cosa
La vida deber ser acariciada, no estrangulada. A veces solo tienes que relajarte y permitir que la vida ocurra sin estarte preocupando constantemente en controlarlo todo.
Aprende a dejar ir de a poco, en lugar de apretar demasiado fuerte. Respira profundo. Cuando el polvo se asiente y puedas ver de nuevo el bosque por sus árboles, da el siguiente paso hacia adelante.
No tienes que saber exactamente el lugar hacia donde te diriges, pues todo en la vida está en perfecto orden tanto si lo lo entiendes como si no. Simplemente toma un tiempo conectar los puntos.
6. Mantener compañeros negativos
No dejes que una persona que tiene mala actitud te la contagie. No permitas que lleguen a ti. No pueden presionar el gatillo si no les das la pistola.
Cuando recuerdas que mantenerse en compañía de personas negativas es una elección, en vez de una obligación, te liberas totalmente. Esto te permite desarrollar compasión en vez de rabia, generosidad en vez de codicia, y paciencia en vez de ansiedad.
«Las personas que tienen la mala costumbre de concentrarse en lo más negativo que en lo positivo, terminan por ignorar lo bueno» – Walter Risso.
7. Conformarte con menos de lo que mereces
Sé suficientemente fuerte para dejar ir y suficientemente paciente para esperar por aquello que mereces. A veces tienes que recibir golpes y caer mucho más abajo de lo que nunca estuviste para levantarte más alto de lo que nunca antes imaginaste.
A veces necesitas lavar tus ojos con lágrimas para que puedas ver de forma clara las posibilidades que están frente a ti. No te conformes.
«El conformismo es la forma moderna del pesimismo» – Antonio Escohotado.
8. Ser demasiado egoísta
Aquellos a quienes inspiraste y con los que compartiste tu amor, recordarán cómo los hiciste sentir mucho después de que tu vida haya terminado.
Así que esculpe tu nombre en los corazones, no en la piedra. Lo que hayas hecho solo para ti mismo muere contigo; lo que hayas hecho por otros y por el mundo permanece. Ejercita el dar sin olvidarte de tu persona, pues un sano equilibrio entre tus necesidades y las de los demás te mantendrán lejos de sentimientos negativos como la codicia.
«El único egoísmo aceptable es el de procurar que todos estén bien para estar uno mejor» – Jacinto Benavente.
9. Renunciar cuando las cosas se ponen difíciles
No hay fracasos, solo resultados. Incluso cuando las cosas no se den en la forma que esperabas, si lo amas, no renuncies.
Aprende lo que puedas y sigue adelante. Quien continúa avanzando un paso a la vez va a ganar al final. Porque la batalla siempre se gana lejos y mucho antes de la victoria final.
Es un proceso que ocurre con pequeños pasos, decisiones y acciones que gradualmente se van acumulando y eventualmente van a guiarnos a ese glorioso momento de triunfo.
10. Dejar que la pereza y el desgano te dominen
El mundo no te debe nada, tú le debes al mundo algunas cosas. Así que despierta y actúa. Deja la pereza a un lado y toma completa responsabilidad de tu vida, toma el control. Eres importante y fundamental.
Es demasiado tarde para sentarse a esperar para que alguien haga algo algún día. Ese día es ahora; el alguien que el mundo necesita eres TÚ.
Artículo recomendado: Cosas que debes hacer por tu cuenta.
Quizás pueda parecer que estas decisiones no van afectarte de momento, pero a largo plazo, para tus proyectos tanto laborales como personales puede que te afecten a tal punto que se te pueda ver con dificultad lograr alguna meta que te propongas.
Es momento de que te examines y veas cuales de estas decisiones tomaste y si estás a tiempo, poder remediarlas. No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
¿Crees que existen decisiones que lamentarás haber tomado? ¿Cómo podrías remediarlo? Quisiera que me comentaras sobre ello 😀
Artículo publicado el 01/02/2017. Actualizado el 07/07/2022.
Pensar las cosas demasiado o pensarlas muy poco, esta es otro accionar del que debemos cuidarnos. Yo en particular estoy aprendiendo lo referente al punto 4. Saber de que no siempre puedo controlar todo y que aquello que no puedo controlar tampoco puede afectar mi vida y delimitar lo que puedo o no hacer. Excelente post. Muchas Gracias.